Lyrics

Este corrido es pa’ los hermanos Romero,
Marco y Adán…
Un homenaje a su historia, A su entrega, a su lucha,
y a su sangre mexicana.




Desde el rancho hasta el norte cruzaron caminos,
Marco y Adán con la frente en alto y destino,
Más de cuarenta y tres años luchando en el norte,
Llegaron a San José California trabajaron con fuerza y con porte.


Desde chiquillos, jalando parejo,
la vida los hizo firmes y parejos,
en el martillo, en la tabla y el clavo,
dos carpinteros que nunca se rajan.


Su padre Don Adán les dejó su apellido,
en Cualcomán dejó el último suspiro,
de Dos Aguas trajo sangre valiente,
y su madre Imelda, mujer del Estado de Guerrero.


Juan Romero canta con toda el alma,
le dicen El Vampi, la música lo llama, Adán por un tiempo brillo en la música.
y su hermana Eva es la flor de la casa,
orgullo de hermanos, la única dama.


Marco Romero, padre ejemplar,
cuatro tesoros lo saben cuidar,
y Adán a su lado, su hermano leal,
en la vida y en el jale, no hay uno igual.


En Washinton Dios les dio su morada,
con sacrificios y jornadas pesadas,
pero al mirar el imperio que han levantado,
dicen: “¡Valió la pena lo que hemos pasado!”.


Aunque ya tienen papeles legales,
el corazón no olvida su tierra, natal,
extrañan México con todo el alma,
pero agradecen lo que Dios les manda.


Y entre ellos siempre hay comunicación,
“¿Qué haces, carnal?” con puro corazón,
se cuidan siempre como buenos soldados,
hermanos del alma, hermanos muy honrrados.




A su padre en el cielo,
y a su madre en la tierra…
los hermanos Romero les rinden tributo.
Orgullosos, trabajadores, mexicanos…
¡de Dos Aguas pa’l mundo!